lunes, 24 de septiembre de 2012

Efectos de las políticas sobre la productividad total de los factores



En América Latina el crecimiento pobre de  países como Nicaragua se debe a bajos niveles de inversión y la productividad con que se utilizan los recursos, con una evolución  que ha sido negativa desde 1991 a 2007. La contribución del capital y el capital humano como factores de crecimiento al PIB total durante el mismo periodo han sido entre el 0,5% y 0,7% respectivamente, mientras que la mano de obra contribuyo en 1,8% al crecimiento del PIB (Daude & Fernández-Arias, pág. 6).

El mínimo agregado de la productividad total de factores pueden ser explicados por la deficiente aplicación de políticas y fallas de mercado que pueden determinar la evolución de la economía. Pretendemos exponer las limitaciones existentes en el sistema financiero y que políticas pueden implementarse para mejorar su impacto en la productividad y su contribución en el crecimiento económico.

El mercado de capital nicaragüense es incipiente, en la década de los 80s se eliminaron la banca privada que vuelve a operar a partir  de los noventa; en esta época  y a principios de los 2000 que el sector financiero sufre varias quiebras bancarias. Durante el año 2000 y 2001 quebraron 4 bancos que representaron el 15% del PIB, esto conllevo a un rescate por el gobierno al sector financiero para evitar el riesgos sistemático adquiriendo varias entidades.

La debilidad institucional afecta a la eficiencia del sector financiero al aumentar los costes ante su repercusión en los niveles de incertidumbre, esto a su vez restringe el crédito y aumenta su precio. La liquidación de activos de los bancos intervenidos por el estado a inicio del 2000 presentaron varias anomalías que fueron expuestas por la Contraloría General de la Republica de Nicaragua durante y en 2008 fue puesto en duda la legalidad los bonos en circulación que se emitieron en respuesta de la crisis bancaria repercutiendo negativamente sobre la estabilidad del sector financiero.

El acceso a crédito es limitado, en el año 2005 el sector financiero proporciono crédito equivalente a un monto de 29,1% del PIB y el crédito a mediano y largo plazo es escaso (BM, IDA y IFC, 2007, pág. 10). La inestabilidad política y social incide en la decisión de préstamos de las empresas y promueve restricciones al crédito de inversión hacia inversiones de consumo. Esto puede incidir en la asignación del crédito que dirige la mayor parte de los recursos hacia el crédito individual y crédito comercial con un 28,5% y 26,8% respectivamente (IMF, 2006, pág. 18).

Otro elemento es el incremento de emisión de deuda interna cuyos principales compradores son los bancos comerciales que genera el efecto de desplazamiento de la inversión, de privada a pública, representa el 18% del PIB. Esto puede generar distorsiones en la asignación de inversiones hacia actividades no productivas y la exposición de riesgo de impago del gobierno por su vulnerabilidad a shocks externos. El sistema de garantía de depósitos asegura el 2% de los depósitos y ante una crisis el país incurrirá en otro desequilibrio fiscal ante crisis bancaria. La otra limitación al crecimiento del sector es la regulación sobre la tasas de interés a las ganancias provenientes de los intereses de los depósitos es un desincentivo hacia la intermediación financiera.

La fortaleza del sistema bancario nicaragüense está estrechamente relacionada con las finanzas públicas por su alta exposición de bonos de deuda interna. Esto hace que una política macroeconómica prudente sea la política más recomendable para evitar una crisis fiscal que desencadene una crisis bancaria. Esto expone la necesidad de mejora en la regulación vigente del sector sobre solución de crisis bancarias para evitar crisis sistémicas del sector.

Entre las reformas que se deben realizar son la eliminación de la tasa impositiva sobre los ingresos de los depósitos y reformas en el sistema judicial para mejorar la percepción de corrupción y eficiencia gubernamental que inciden en la intermediación financiera.

miércoles, 19 de septiembre de 2012

Limitaciones al Crecimiento Económico de Nicaragua


El desarrollo económico es un proceso de cambios continuos en la esfera productiva que conllevan a demandar mejoras tecnológicas en el área de bienes y servicios y reformas institucionales que se adapten a la estructura económica para generar externalidades positivas que reduzcan los costes de transacción de los agentes y rentabilidad de inversiones. Estas reformas institucionales pueden ser físicas (infraestructuras) como una carretera, puerto, etc. o subjetivas como escolarización de sus ciudadanos, salud de los mismos, etc. que inciden el funcionamiento de la economía.

La motivación principal para exponer algunas limitaciones al crecimiento surgen a partir de una serie de publicaciones de carácter teórico y empírico que se refieren a las restricciones al crecimiento entre las que podemos destacar (Hausmann, Kliger, & Wagner, 2008), (Agosin, Bolaños, & Delgado, 2009) y (De Franco, 2011) estas identifican los elementos los principales obstáculos que deberían ser tomados en cuenta para el crear de estrategias de desarrollo nicaragüense.

El BID (Agosin, Bolaños, & Delgado, 2009, pág. 332) identifica que una de las limitaciones al crecimiento económico es la vulnerabilidad macroeconómica[1], estas determinan factores estructurales específicos que condicionan la exposición de la economía la economía a shocks económicos y/o financieros. Si un país tiene poco margen de maniobra para lidiar con tales efectos negativos, es probable que el crecimiento y desarrollo económico sea afectado en mayor medida.

El bajo nivel de capital humano capital humano fue expuesto por el Banco Mundial (World Bank, 2004) como uno de los factores que limita el crecimiento económico. Al analizar datos sobre el nivel educativo de la población mayor de 15 años para el año 2000; el 9,6% tiene completado estudios de primaria, el 3% tiene completado estudios de secundaria y el 4,3% tiene completado educación terciaria (Barro & Lee, 2000).

Al tener en cuenta es que la inversión en educación influye en el capital humano, importante para la competitividad de los productos nicaragüenses. El presupuesto de educación está destinado principalmente hacia gastos corriente, el 92,7% mientras que el 7,3% es catalogado como gasto de capital, el cual está compuesto prácticamente por los gastos de infraestructura y equipamiento básico.

Otro elemento que repercute negativamente sobre la inversión privada es la poca y baja calidad de la infraestructura-  puertos, aeropuertos, telecomunicaciones y carreteras- repercutiendo negativamente sobre la competitividad y la creación de valor añadido. Nicaragua no cuenta con un sistema ferroviario. Este problema se agudiza en áreas rurales que carecen de transporte, agua potable y alcantarillado e infraestructuras de Mercado.

Al ver las estadísticas para el año 2009, 11,62% del total de carreteras estaban asfaltadas a nivel nacional, 85% de la población tiene acceso a agua potable y el 52% tiene servicio de alcantarillado. Estos datos reflejan un panorama poco alentador que se deteriora aún más si tomamos en cuenta que en 20 años se avanzó en 1,12% en porcentaje de carreteras asfaltadas, 11% de incremento de cobertura de agua potable y 9% en mejoras de servicio de alcantarillado.

Uno de los factores que limita la inversión privada en Nicaragua es la poca institucionalidad. Existe incoherencia de políticas, favoritismos e incertidumbre sobre las reglas del juego que dificultan los planes de negocios y su capitalización. La inestabilidad política fue el factor detrás de las ultimas 2 rupturas durante la década del 2000 con el FMI.

Mencionemos que como consecuencia de las denuncias de fraude en las elecciones municipales de noviembre 2008, que desencadeno la suspensión de cooperación internacional por más de 400 millones de dólares, se estima que Nicaragua perdió cerca de US$ 400 millones de dólares (Vargas, 2010, pág. 89). Las nuevas denuncias de fraude en las elecciones presidenciales de 2011, agudizo los problemas de cooperación bilateral y el país se quedó prácticamente con recursos provenientes de países amigos (Venezuela, Rusia, Irán, entre otros) y agencias multilaterales.

El Índice de Evaluaciones Institucionales y de Políticas por País (CPIA) del Banco Mundial, donde 1 es bajo y 6 es alto, se aprecia un descenso en los niveles de transparencia. Según encuestas del Banco Mundial en el año 2010 realizadas a empresas, el 52% considera que una de las limitaciones del crecimiento es el alto índice de corrupción y un 38% de las empresas el sistema judicial al ejecutar sentencias no apegadas a derecho.